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El calor se acerca sin avisar ¿Tienes a punto tu aire acondicionado? ¿Hará falta recargar el gas del aparato? En principio, solo necesitas recargar el gas de tu aire acondicionado si se ha producido alguna avería o hay fugas en el circuito. Aquí tienes las pistas para detectar si necesitas recargar el gas refrigerante de tu aparato de aire acondicionado.
Llega el calor, y con él la necesidad de climatizar nuestros hogares. Es momento de poner a punto tu equipo de aire acondicionado.
Puede que alguien te haya comentado que ha tenido que recargar el gas de su aire acondicionado, o que te lo hayan aconsejado en una revisión. Te estarás preguntando entonces ¿cuándo es necesaria la recarga del aire acondicionado? Para entender mejor cuándo puede ocurrir esto, conviene que tengas claro qué elementos tiene y cómo funciona un aparato de aire acondicionado.
Los aparatos de aire acondicionado usan un gas refrigerante que intercambia el calor con el ambiente para así producir aire frío o aire caliente según convenga. En los sistemas actuales con bomba de calor, ese fluido refrigerante gas circula por un circuito que "absorberá" el calor por un lado y lo evacuará por el otro. Ese circuito es hermético y, en condiciones normales, el gas no se debería escapar.
Los componentes principales del circuito son:
También habrá un regulador, entre el condensador y el evaporador, y ventiladores para hacer circular el aire en el evaporador y el motor. Dado que cuando el aire se enfría aumenta su humedad, los aires acondicionados también tienen la capacidad de deshumidificar, para garantizar un mayor confort de los ocupantes.
En principiono es necesario recargar tu aparato, ya que el gas del aire acondicionado no se gasta con el paso del tiempo ni pierde su efectividad. El gas solo hay que recargarlo cuando se producen algunos problemas frecuentes, indicio de que es necesaria esa recarga:
Si tu equipo presenta alguno de estos problemas, es posible que exista alguna fuga en el circuito.
Si observas alguno de estos problemas, no te cruces de brazos:
1. Contacta con un instalador autorizado para que revise la instalación, pues posiblemente hay una avería del sistema, que habrá que reparar antes de recargar el gas. Recuerda que la instalación de los equipos de aire acondicionado debe ser realizada por instaladores doblemente certificados, debido principalmente al nivel contaminante de los gases. Igualmente, si hay que recargar o manipular el circuito de gases, debe hacerlo un instalador autorizado.
2. El instalador comprobará la estanqueidad del circuito, verificando la presión para ver si hay fugas.
3. Tras eso, llega el momento de recargarlo con el gas correspondiente, y esperar no tener que hacerlo de nuevo en el futuro. El instalador te indicará también qué tipo de gas es el apropiado.
Aprovecha para realizar otras tareas de mantenimiento: limpieza de los filtros de la unidad interna, limpieza del split, limpieza de la unidad externa...
El precio de recargar el aire acondicionado varía en función del tipo de gas y de la cantidad necesaria, así como del coste de servicio del técnico. Recargar aire acondicionado con gas R410a suele costar entre 100 y 200 euros, aproximadamente, incluyendo el servicio. Las recargas con gas R-32 tienen un coste ligeramente superior, sobre los 340 euros.
España es uno de los pocos países de la Unión Europea con un impuesto especial sobre la emisión a la atmósfera de gases fluorados, utilizados como refrigerantes en este tipo de sistemas. Para simplificar la recaudación del impuesto, en vigor desde 2015, el Gobierno pretende además extender el gravamen a la fabricación o importación de equipos precargados y a la primera carga de refrigerante en instalaciones nuevas. Esto se podría traducir en un encarecimiento de entre el 5% y el 10%.
En los últimos años se están extendiendo los más eficientes y respetuosos con el medio ambiente para ajustarse a las normativas medioambientales. Los equipos más recientes utilizan gas R32 que reemplaza al R410A en los aparatos domésticos , aunque todavía está presente en algunos electrodomésticos. El potencial de calentamiento global (GWP) de R32 es de aproximadamente un tercio del GWP de R410A, resulta más fácil de reciclar y aporta una eficiencia mayor al acondicionador de aire.
En 2010 se prohibió la utilización de gases refrigerantes tipo HCFC (como el R22) en equipos de refrigeración y aire acondicionado, tal y como establece el Reglamento 2037/2000 del Parlamento Europeo y del Consejo sobre las sustancias que afectan a la capa de ozono.
Lo ideal es realizar una revisión y mantenimiento anual de los equipos de aire acondicionado. No obstante, si se utiliza el equipo tanto como calefacción como sistema de aire acondicionado, conviene ampliar esta revisión a dos veces al año, antes del comienzo de cada época, de frio y calor.
Si aún no tienes un equipo de aire acondicionado, o tu sistema está anticuado y necesitas cambiarlo, en OCU te ayudamos a elegir con acierto el producto que necesitas.
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